TEMUJIN, el Conquistador más grande de la Edad Media
Nos situamos a principios del Siglo XIII en las Estepas
Mongolas, para contemplar como Miles de Jinetes a Caballo, Armados con un Arco y
un Sable, esperan la señal del Gran GENGIS KAN, para Conquistar el Mundo
conocido de entonces.
No hay que olvidar que estamos ante los mejores Jinetes
de la historia, además de expertos Lanzadores de Arco.
En definitiva, la Vida Nómada que habían elegido
vivir, les había otorgado la necesidad de convertir ambas facetas, en su
mejor cualidad.
Aunque por otro lado su Tecnología Militar no había
sufrido grandes cambios en los últimos 2000 años, ni tan solo su poder
organizativo.
Todavía en la actualidad los Mongoles y el Caballo forman
una unidad.
Pero una cosa hacia especial a éste Ejército, la
figura de Gengis Kan.
El General más grande de su época, que mediante un
nuevo sistema basado en los Méritos Personales, se dispuso a conquistar todos
los territorios desde China, hasta Oriente Próximo en los siguientes 20 años.
Además de preparar el terreno a sus sucesores, que
pondrán contra las cuerdas a Europa e incluso al Hermético Pueblo Nipón.
Pero este personaje no salió de la nada, fue fruto
de una serie de vivencias de un joven llamado TEMUJIN.
VIVIR EN LA ESTEPA MONGOLA
Es evidente que las estepas mongolas no era el
mejor sitio para nacer en el siglo XII.
Teniendo en cuanta las Inhóspitas Llanuras, los Enormes
Vientos, las Gélidas Noches de Inviernos y los Tórridos Días de Verano.
En definitiva uno de los lugares con peores
condiciones de vida, del planeta.
Las Estepas de Mongolia
A todo ello debemos añadir unas tradiciones
extremadamente contrarias a los más desfavorecidos, como por ejemplo los niños.
Sin ir más lejos, las Gélidas Noches de Invierno los
Mongoles se juntaban, en torno al fuego de las Yurtas.
El primero en coger sitio el Varón de la Casa y sus
Guerreros Invitados, luego las Mujeres tanto del Señor de la casa como de estos
últimos, mientras los Niños debían buscar los huecos que quedaran disponibles.
Este orden se volvía a repetir en los turnos de
comida, lo que no querían los Guerreros y las Mujeres, quedaban para los más
pequeños.
Aunque la Primavera era la mejor época, ya que las Ovejas
estaban en proceso de Engorde, la Caza era Abundante y las Cabras además
de las escasas Vacas, daban Leche a todas horas.
Lo peor venia en las Postrimerías de los Duros
Inviernos, sin Caza y sin posibilidad de sacrificar el Ganado, el Hambre se
hacía Palpable.
Es en ese momento cuando los niños aprenden a Sobrevivir,
Cazando Perros y Ratas a Lomos de improvisadas Ovejas.
En definitiva, ¿qué mejor forma de Criar los Guerreros
de las Estepas?
En conclusión, ese es el contexto en el que nació
en un lugar indeterminado de la Estepa Mongola, alrededor del año 1162, el Joven
Temujin.
Su nombre proviene del último Enemigo Apresado por Yesugei,
el padre de nuestro personaje.
LOS PRIMEROS AÑOS DE TEMUJIN.
Lo primero que conocía cualquier niño nacido en las
Estepas Mongolas, eran las Yurtas.
Aquellas enormes tiendas de Fieltros Tendidos sobre
palos, perfectamente encaladas y adornadas, se convertían en su hogar portátil.
Ya que eran trasladadas por las Estepas en Carros
Tirados por Bueyes, en busca de los mejores Pastos para el Ganado.
El Festival Mongol de Naadam, sigue cada año
recordando la tradicional vida de las Estepas.
Las encargadas de mantener las Yurtas eran las Madres e Hijas,
sin ir más lejos la Hermana pequeña de Temujin, tenía encomendada la tarea de
mantener encendido el fuego.
De igual forma que Temujin detentaba las
suyas propias, concretamente nuestro personaje se debía ocupar de la Pesca y
del cuidado de las Yeguas.
Desde bien pequeño destacó por su fuerza, su valor,
su capacidad de reflexión y especialmente su compromiso con las costumbres de
los Mongoles.
No había cumplido los 9 años cuando ya había matado
a su hermanastro, el Delito que cometió éste, fue Robarle continuamente el Pescado
por la mañana.
Pero Temujin fue fiel a uno de los
principales ideales de los Mongoles, la venganza era un deber para estos Jóvenes
Nómadas.
GENGIS
KAN
La mejor escuela que tuvo Temujin fueron las Hogueras
Nocturnas, aquellas en las que debían espabilarse para encontrar buen sitio.
En ellas el Joven Nómada escuchó Historias de sus Antepasados,
allí aprendió lo que significaba el Linaje en el Mundo Mongol.
Sus Antepasados habían sido Grandes Kanes, uno de
ellos, había Muerto Envenenado, tras haberle arrancado las Barbas al mismísimo Emperador
Chino de Kitán.
Las lecciones que aprendió en torno a la Lumbre, le
acompañaran toda su vida.
El Joven Temujin recibió un encargo de sus
mayores, había que cambiar la historia del Pueblo Mongol, no se podía seguir
saqueando y escondiéndose continuamente.
Para ello, había que empezar a construir
poblaciones, y acabar con Hábitos Ancestrales entre los Nómadas del Desierto de
Gobi.
Definitivamente una frase que escucho una fría
noche cambiara el destino de los mongoles: “los Monasterios y los Templos engendran
dulzura, pero únicamente la fiereza y el Temperamento Belicoso dominan el mundo”.
LA NOCHE QUE TODO CAMBIÓ.
Temujin se había convertido en un buen Jinete, y solía Cabalgar
junto a su padre; era un Joven Alto, con el Cabello Largo y especialmente poco
hablador.
Pese a lo cual se enamoró de la hija del Guerrero
Extranjero, que había ido a visitar Yesugei.
La Joven Burtai, no tenía más de 9 años, pero
aún y así su pretendido Suegro accedió a que Temujin se quedara con
ellos, para ir conociendo a su hija; de esta manera el Padre de Temujin partió
de vuelta.
La noche siguiente, a Temujin, le sorprendió la
llegada de uno de los Guerreros de su padre.
Además las noticias que traían eran Nefastas, ya
que éste había fallecido la noche anterior, tras ser Envenenado.
El Joven Temujin debía volver a la mayor
celeridad posible, ya que gran parte de los Nobles que sustentaban el clan de
los Yakka,
acababan de desertar ante el temor de quedar desprotegidos con el nuevo kan.
Así de esta forma y con solo 13 años se quedó como
máximo represéntate de dicho Clan, debiendo gestionar gran parte
de las tierras al este del Lago Baikal.
LOS EJÉRCITOS
MONGOLES.
Las tierras en cuestión, que pertenecían a la
familia de Temujin desde tiempos de su bisabuelo, pasaban por ser
las mejores de las Estepas Mongolas.
Por ellas discurrían 2 Ríos, el Kerulón
y el Onón,
que recogían las aguas de las montañas cercanas.
Ambos convertían a esta zona en una de las más Fértiles
para los Pastos, con Colinas llenas de Abedules y Abetos, donde abundaba la Caza.
En definitiva tras la muerte del Yesugei,
estas tierras se convirtieron en el deseo del resto de Clanes, al quedar bajo la
supervisión de un niño de 13 años.
TEMUJIN SE CONVIERTE EN GENGIS KAN
El Principal Candidato a poseer los territorios del
Joven Temujin, fue Targutai el jefe del Clan de los Taidjusts.
Este lo tenía fácil, ya que la mayor parte de los
súbditos habían abandonado al Joven Mongol, para acudir a su servicio.
Pero este hecho no debió ser suficiente para Targutai,
y decide ir a por el joven Temujin.
Un Ejército encabezado por él mismo, se dirigió a
la Aldea de nuestro protagonista.
La madre de Temujin le dijo que huyera y no se
preocupará, aquellos hombres solo lo querían a él, por lo que su familia
estaría a salvo.
Temujin hizo caso expreso de las órdenes de su madre y
tras unos días cabalgando, llegó a las montañas de Khingan, donde se mantuvo
escondido una temporada.
Pero el hambre se hizo evidente, y en uno de sus
descensos en busca de Caza fue apresado por el Clan de los Taidjuts.
Tras lo cual fue sometido a Múltiples Torturas,
hasta que de nuevo con la ayuda de un Joven Extranjero consiguió huir.
Fotograma de la Película
“El Mongol”
La vuelta a la Aldea debió ser uno de los
momentos más duros, junto a la muerte de su padre, del joven Temujin.
La llegada del ejército de Turgutai, no debió ser
como predijo su madre, ya que toda la Aldea estaba arrasada, y todo el Ganado
Yacía Carbonizado.
Durante los siguientes días siguió el rastro dejado
por su familia, hasta encontrarla completamente Exhaustos, Hambrientos y
Humillados.
Fue ese momento en el cual Temujin dejó de ser un
niño y tras prometer a su madre que nunca más pasarían por ese trance, decidió
convertirse uno de los más grandes conquistadores que la historia ha
conocido.
La Estatua de GENGIS KAN, nos desvela la
importancia del personaje más importante de Mongolia.
Hasta aquí ha llegado el relato, Mitad Historia,
Mitad Leyenda, de cómo un niño se convirtió en Gengis Kan.
Destacar por último que a su muerte en 1227, cuando
debía contar con alrededor de 65 años, su dominios llegaban desde el Océano
Pacífico hasta el Mar Caspio.
Además tanto su vida como su muerte se han convertido
en una de las leyendas más apasionantes de la historia, como refleja que a día
de hoy su tumba que sigue siendo buscada, así nos recuerda Historias de
nuestra Historia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario