¿CÓMO SE DESCUBRIÓ EL FUEGO? - EL DOMINIO DEL FUEGO

¿CÓMO SE DESCUBRIÓ EL FUEGO?, EL DOMINIO DEL FUEGO

El descubrimiento más importante de la Historia de la Humanidad es el fuego.

El Hombre, en concreto el Homo Erectus fue quién descubrió el fuego hace 1.600.000 mil años, pero no se llegó a dominar hasta hace aproximadamente 780.000 años y fue un paso gigante que condicionaría la evolución de la humanidad.

Y tú me dirás, ¿pero que me estás contando?, ¿Cómo que se descubrió el fuego hace más de 1 millón de años y no lo dominaron hasta pasado mucho tiempo después?, pues porque El Homo Erectus ¡no sabía cómo hacer fuego!

Ellos lo tomaban prestado gracias a fenómenos naturales que provocaban las condiciones necesarias para que hubiera fuego como por ejemplo un rayo o lava de un volcán, y ya te puedes imaginar el valor que suponía descubrir un lugar con fuego para nuestros antepasados que lo llegaban a proteger con su vida.

En la antiguedad, los homínidos (humanos) morían tanto de frío como de hambre.

El poder controlar el fuego fue un salto brutal ya que les permitió tener una fuente de calor para protegerse de las condiciones climáticas.

Por otro lado, la invención del fuego aportó otros beneficios como la iluminación en las cuevas oscuras donde dormían y en caso de que algún depredador se acercara por la noche, los ahuyentaba.

Poder cocinar la carne cazada con el fuego fue un salto de supervivencia grandioso ya que alargó la media de esperanza de vida, debido a la eliminación de gérmenes en la carne consiguiendo que los humanos se acabaran multiplicando. 

  

¿SABES QUE EL DOMINIO DEL FUEGO DIÓ EL EMPUJÓN AL DESARROLLO DEL CEREBRO HUMANO VERDAD?

¡Pues sí! La inteligencia del hombre primitivo pasó a otro nivel gracias al dominio del fuego.

La comida se podía calentar, con lo cual estaba más tierna y se podía ingerir más cantidad.

La mandíbula evolutivamente fue menguando, ya que no necesitábamos tanta fuerza para masticar la carne y ello conllevó a un mayor hueco para desarrollar la masa del cerebro.

El comer más carne nos aportó una serie extra de nutrientes de los que el cerebro se aprovechó ¡para hacernos unos animales más inteligentes!